
Dios se ha esmerado tanto en la creación y nos ha encomendado el cuidado de ella. Nos volvemos cocreadores con Dios cuando somos justos y responsables con nuestra familia. Nuestra responsabilidad no es “tener buenos resultados” sino “dar buenos frutos”. Defendamos nuestra casa común, nuestro hogar, nuestra sociedad. Lectura bíblica: Mt 21, 33-43
Podcast: Reproducir en una nueva ventana | Descargar
Suscríbete: RSS
Debe estar conectado para enviar un comentario.